Podrían ser en torno las 18:30 horas del día 23 de junio, Mary Tere (mi mujer) y Yo, nos hallábamos paseando bajo la sombra de los árboles que rodean la Colegiata de Covarrubias, y vimos que los señores presidentes ( Javier y Elena) se acercaban a nosotros, con creo yo, no muy buenas intenciones.
Está sospecha se confirmó cuando con esa voz sosegada, amable y alegre nos comentaron “si podríamos hacer un breve artículo” para el blog del movimiento acerca de cómo se había desarrollado a nuestro entender el día de convivencia del encuentro de zona.
Preguntado acerca del tiempo de que disponíamos, respondieron que unos quince días, y teniendo en cuenta que en cuatro días nos vamos de vacaciones, pues eso que dispongo de apenas cuatro días para el mencionado “encargo”.
Todo comenzó en torno a las 11:00 horas del día 23 de junio de 2012 en torno a unas mesas del hotel Silos 2000, alrededor de las cuales nos juntamos la gente del movimiento familiar cristiano de Santander, Valladolid, León, Segovia y Burgos para tomar un pincho de bienvenida.
En total unas 150 personas bajo un tórrido sol castellano de aquellos del poeta Antonio Machado.
Antes con pegatinas de distintos colores (hay que ver lo que puede hacer una pegatina), los miembros de la organización nos juntaron a miembros de distintas ciudades para confraternizar antes.
Puedo decir que el resultado fue estupendo; ya desde el primer momento hubo feeling entre todos, daba gusto ver la mezcla de mayores y no tan mayores con los pequeños, lo cual daba la idea de un movimiento muy vivo.
Llego la hora de la visita al monasterio de Silos, y divididos en grupos hicimos una visita guiada. Silos sorprende siempre por mucho que lo veas y si encima ves las camas de los monjes flotando literalmente y con ella todos sus enseres, pues mucho más.
Sin apenas tiempo para el descanso, escuchar a los monjes cantar en gregoriano, nos preparó para la misa de las 14:00, la cual sirvió para darnos cuenta de que todos somos un mismo cuerpo. Presidida por Don Javier, resultó de una sintonía total, disponíamos de monaguillos, gente para las distintas lecturas y salmos, para las preces…. disponíamos hasta de coro y todo ello con gente de distintas procedencias pero en sintonía.
En seguida se hizo la hora de compartir mesa, dicen que éramos en torno a 150, pero la verdad es que parecíamos muchos más. Buena comida, buena compañía y en los postres se proyectó una presentación de los distintos movimientos de la zona norte junto con las jornadas de la Familia celebradas en Milán.
No es que se tratara de una carrera o de una competición, es que ya eran las 17:00 horas y nos quedaba todavía visitar la Yecla y Covarrubias. Si Silos les gustó, la Yecla les sorprerndió.
Tras la visita a la Yecla tocaba la colegiata de Covarrubias, la cual era también guiada y algo “más ligera” de lo habitual pues los de Santander tenían que partir.
En seguida se hizo la hora de la despedida con el buen sabor de la jornada de convivencia y con la sensación de que había habido muy buena sintonía entre todos, lo cual nos anima y reconforta.
A todos los “movimienteros” de Burgos asistentes mi/ nuestra felicitación y a los ausentes, deciros que os echamos en falta.
Nos vemos en los próximos actos.
Ah, ¡ FELICES VACACIONES A TODOS! Y UN FUERTE ABRAZO.
Julio César y Familia.
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